café ecológico · 16. julio 2020
Negro, caliente, en una taza muy caliente: Nápoles no solo es sinónimo de pizza y Vesuvio, sino también de café, el que se toma en el bar, el que también se debe ofrecer a aquellos que no conoce, el famoso café suspendido. Porque Nápoles es así: nunca se niega un café, nunca se abandona un café, así como ese ritual de unos minutos, suficiente para sonreír al día.